Hay personas que siempre están dispuestas a ayudar a quien más lo necesitan, personas que muestran su humanidad y bondad incluso si las circunstancias las toman por sorpresa. En contraste con esas personas tan ruines que dudamos en realmente llamarlas personas.
Bret y Zach Winnegar pertenecen al primer grupo, padre e hijo, se encontraban dando un paseo en motocicleta a las afueras de Little Rock, Arkansas, cuando vieron a lo lejos una caja.
La curiosidad de encontrar algo así en un lugar tan desolado los hizo acercarse y se dieron cuenta que era una caja de mascota, que al parecer llevaba ya tiempo ahí, mordida desde adentro como si el animal intentara escapar.
Cuando la abrieron apareció una perra en muy mal estado, con mala postura por haber estado encerrada en ese lugar tan pequeño que, además, estaba lleno de suciedades y desperdicios.
Rápidamente le dieron comida, la cual devoró rápidamente y se la llevaron con ellos para que pudiera recibir atención médica y reconocer su estado.
Al llegar al veterinario, encontraron que Charlie Bravo, como llamaron a la perrita, tenía apenas 8 meses de edad y que las uñas de las patas las tenía tan enterradas que incluso le estaban creciendo hacia adentro de la piel, lo que le dificultaba caminar correctamente.
Le tuvieron que tratar algunas heridas ocasionadas por el encierro y lavar y desinfectar las patas, las cuales eran originalmente blancas pero de tanta suciedad de la jaula se habían oscurecido.
Originalmente los Winnegar no tenían el plan de quedarse con Charlie, pero después de haberla cuidado decidieron que no podían separarse de ella y se unió a la familia que ya contaba con otros 3 perros previamente rescatados.
Al compartir la historia de Charlie en las redes sociales, la gente le comenzó a hacer donativos para cubrir con los gastos médicos pero fue tal la cantidad que recibieron que lograron cubrir esos gastos y decidieron donar el resto a refugios animales.
Ellos mismos planean iniciar con un refugio y una asociación para el rescate animal bajo el nombre de “Los Ángeles de Charlie”.